Si pone cica, delante, se trata de cremas o cosméticos cicatrizantes. Y se refiere a un ingrediente que muchos califican de 'milagroso', la centella asiática, llamada 'cica', de ahí el nombre, un antioxidante herbal que posee y se distingue por sus propiedades en pieles secas, sensibles y/o que tienden al envejecimiento (léase arrugas).

Porque las cremas cica, son definidas por los más como las cremas que tratan la arruga como si se tratara de una cicatriz y contemplan en su prospecto dicha acción. Pero, ¿es real esta acción o se refiere más bien a la protección de pieles frágiles o fragilizadas?

Sea cual fuere la respuesta, la cual vamos a dar, las cica no obstante, son un best seller de y en la farmacia, y numerosos los laboratorios que las formulan y postulan.

Las cremas cica no se han de confundir con los antiguos ungüentos de la botica y fórmulas magistrales, que llevaban antisépticos o activos antiinflamatorios e iban destinados a tratar heridas.

Las pieles frágiles son su verdadero objeto de deseo, pieles agredidas por picazón, sobrecalentamiento, procedimientos dermoestéticos, tatuajes, etc.

Aíslan, protegen y reparan

La centella asiática mejora ostensiblemente la microcirculación de la piel, cosa que permite a los nutrientes, las vitaminas, los minerales y el oxígeno alcanzar más profundidad y extensión en su efecto.

Además, estimula el metabolismo de las células y rejuvenece el aspecto de la piel, aumentando el poder de cualquier crema cica, o cicatrizante para reparar daños.

Lo cierto es que la 'cica' (centella asiática), no es, aunque pudiera parecerlo, dado el auge actual de este tipo de cremas, precisamente una recién llegada: ha sido utilizada durante siglos en la medicina ayurvédica para tratar desórdenes de la piel. Y no solo eso, con la centella asiática distintas cultura atajaban el dolor de estómago e incluso ansiedad.

Que no te confundan

Eso sí, los últimos y más reciente estudios confirman su capacidad para mejorar los niveles de hidratación del cutis, disminuir todo tipo de inflamaciones, desde acné a eczemas y aumentar la producción de colágeno para incrementar la firmeza y elasticidad, o lo que es lo mismo, tratar y prevenir la arruga.

Dichas investigaciones y el auge de la medicina y la cirugía estética les han convertido también en las más aconsejadas en los casos de pieles agredidas, irritadas, que tengan la barrera cutánea debilitada o que se hayan sometido a algún tratamiento estético. Y ya no solo a nivel facial y corporal, sino también del cuero cabelludo en caso de descamaciones o heridas por algún determinado proceso tanto mecánico, exógeno o endógeno.

La centella asiática mejora ostensiblemente la microcirculación de la piel, cosa que permite a los nutrientes, las vitaminas, los minerales y el oxígeno alcanzar más profundidad y extensión en su efecto.

Queda una duda, a la cual la farmacia da sabia respuesta, las cremas cica no se han de confundir con los antiguos ungüentos de la botica y fórmulas magistrales, que llevaban antisépticos o activos antiinflamatorios e iban destinados a tratar heridas.

En la actualidad, y para que sean aún más potentes, realmente efectivas a la hora de combatir la arruga, lo idóneo es que a la centella asiática se unan en su composición otros activos como silicona, ácido hialurónico o vitamina A y E.

Estos son ingredientes esenciales para que las denominadas cremas cicatrizantes actúen 'borrando' arrugas, ya que en combinación, la 'cica' y los ingredientes citados, entre otros, estimulan la producción de colágeno en los tejidos y es esto lo que en definitiva, va a tratar el envejecimiento de la piel.









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