La melanina es el pigmento encargado de dar color al pelo, los ojos y la piel, y de ofrecernos cierto grado de protección natural contra los UV. Sin embargo, los sistemas endógenos de protección y reparación de la piel ante los envites del sol necesitan una ayuda extra para afrontarlos. Junto con la protección solar tópica adecuada, MartiDerm propone hacerlo también desde el interior con una fórmula nutricosmética de vanguardia.
DSP-Antiox Capsules aúna en cada cápsula una acertada combinación de activos que aumenta la capacidad de protección natural de la piel frente al sol, previniendo el fotoenvejecimiento y las manchas.
La fórmula
» Nutroxsun®: Avanzado complejo de gran poder antioxidante, a base de extractos de romero y pomelo, fotoprotector y antiedad.
» Licopeno: Carotenoíde vegetal antioxidante y preventivo de la formación de manchas en la piel.
» Multivitamin Complex: Vitaminas A, C, D y E que protegen de la radiación UV gracias a su poder antioxidnate y mejoran el equilibrio mineral.
» Selenio: De gran poder protector de la membrana celular, neutraliza los radicales libres y apoya los sitemas de reparación naturales de la piel.
» Zinc: Ayuda a reparar los tejidos dañados con su acción regenerante celular.
Se recomienda tomar 1 cápsula al día durante la comida, durante al menos 1 ó 2 meses antes y durante la época estival en la que la piel vaya a estar más expuesta a los rayos UV.» Luteína: Carotenoíde con presencia natural en el organismo que protege contra la acción negativa de los rayos UV
¿Cuándo tomar DSP-Antiox Capsules?
Se recomienda tomar 1 cápsula al día durante la comida, durante al menos 1 ó 2 meses antes y durante la época estival en la que la piel vaya a estar más expuesta a los rayos UV, como suele ser en las vacaciones de verano.
Pero, ¿porqué empezar cuanto antes? La acción sinérgica de sus activos tiene una incidencia acumulativa en la piel, lo que quiere decir que esta, irá fortaleciendo sus sistemas endógenos de protección con su ingesta progresiva, y a la asimilación de los carotenoides que se depositan bajo la epidermis, sumándose a la protección natural de la melanina que generamos cuando nos exponemos al sol. En conjunto, no sólo se obtiene una línea de protección desde el interior que se suma a la que conseguimos al aplicar un fotoprotector tópico, sino que conseguimos una acción preventiva de las manchas y a la vez, conseguimos un bronceado más homogeneo y luminoso.