Hace 30 años se escribía la primera página de la historia de Eau Thermale Avène. Pierre Fabre, su creador, farmacéutico emprendedor, ya al frente de su grupo farmacéutico, descubre las termas de Avène.

Convencido de las virtudes de este agua pura, activa y poderosa, decide compartir sus beneficios calmantes y reparadores con el mayor número de personas posible. En el año 1990, la Estación Termal de Avène reabre sus puertas y nace la marca Eau Thermale Avène.

La Estación termal de Avène se ocupa de tres indicaciones principales: eczema y dermatitis atópica, psoriasis y cura post-cáncer.

Pierre Fabre crea el termalismo científico en el corazón del entorno protegido del Parque Natural Regional de Alto Langueddoc. Y a tan sólo unos pasos de la Fuente, crea los Laboratorios Dermatológicos Avène.

Desde siempre, Eau Thermale Avène se compromete a perpetuar su misión principal: ofrecer a todas las pieles sensibles la experiencia de una mejor calidad de piel y de vida.

Y, para celebrar este 30 aniversario, la pureza y el poder del Agua Termal se encuentran en una edición limitada de su icónico espray, que ofrece todas las propiedades calmantes, antiirritantes y suavizantes del agua.

Además, la firma se compromete, a través de Skin protect, Ocean respect, a innovar con la mejor fotoprotección a la vez que respetar los océanos.

Los Laboratorios dermatológicos Avène han desarrollador nuevos activos biotecnológicos postbióticos a partir de su microflora, como la I-modulia® y [C+-Restore] TM. El deseo de innovar ha llevado también a la Unidad de producción de Avène a adquirir un proceso industrial de esterilización completa de fórmulas único en el mundo.

Gracias a la cosmética estéril, las pieles sensibles y propensas al eczema atópico pueden beneficiarse de cuidados de alta calidad formulados sin conservantes. Los 30 próximos años, la firma seguirá superando sus límites, explorando y desarrollando nuevas fórmulas.









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