Los piojos no hacen ningún tipo de distinción entre el pelo limpio o sucio y parecen tener preferencia por el pelo fino y limpio. Es bastante frecuente que en los centros escolares se reciba la ya temida "alerta por piojos" entre padres y profesores, que pone a todo el mundo en conocimiento de que estos incómodos visitantes capilares ya están entre algunos niños.
Los dos principales problemas de estos incómodos huéspedes son que se contagian con mucha facilidad y que se reproducen muy rápido, ya que un piojo puede vivir unos 30 días y una hembra adulta es capaz de poner un entre 6 y 10 huevos por día.
Hay que evitar el uso compartido de todos aquellos artículos que puedan tener contacto con el pelo: prendas, peines, coleteros, sombreros, bufandas etc.Aunque los tratamientos con pediculicidas, o tratamientos para eliminar los piojos, no se recomiendan hasta la aparición de los mismos, bien es cierto que la utilización de algunos activos naturales con estas propiedades puede ayudar a evitarlos.
Tal es el caso del aceite de árbol de té, un producto natural extraído del árbol maleuca arternifolia (Australia), que ayuda a repeler los piojos, previniendo, además, que éstos puedan alimentarse a partir de la piel que ha sido previamente tratada con el aceite.
Saluvital propone dos productos para evitar y combatir esta afección, tan común tanto en niños como en adultos.
Champú & Gel de Árbol del Té.
El aceite de árbol de té es conocido tradicionalmente por sus propiedades antifúngicas, antiséptico, antibacterianas y preventivas en pediculosis.
Su fórmula incluye extractos 100% naturales y es apto para todo tipo de piel y cabello. No contiene parabenes.
Acondicionador Bifásico Desenredante de Árbol de Té.
Debido a su combinación de ingredientes, este acondicionador nutre y protege el cabello desde el interior revitalizándolo y aportándole suavidad, ayudando así a desenredarlo después del lavado. No hace falta aclarado.
CONSEJOS CONTRA LOS PIOJOS.
Juan Manuel Mata, director científico de Saluvital, nos ofrece cuatro consejos para evitar el contagio o actuar en caso de que se produzca el mismo:
Es recomendable supervisar diariamente la cabeza de los niños. Sobre todo, si se da un caso de pediculosis en la familia o en la escuela, o se percibe picor en el cuero cabelludo.
Hay que evitar el uso compartido de todos aquellos artículos que puedan tener contacto con el pelo: prendas, peines, coleteros, sombreros, bufandas etc.
Ante un contagio de algún miembro de la familia hay que lavar las sábanas y toallas a 60 grados. Lo que no se pueda lavar hay que introducirlo en una bolsa de plástico hermética durante varios días, ya que los piojos se alimentan cada 4-6 horas de la sangre del huésped y no pueden vivir tanto tiempo aislados.
Utilizar productos con pediculicidas naturales, como el aceite de árbol de té, para evitar al máximo el contagio.